¿Cómo freír queso de cabra?

 

 

Uno de los grandes clásicos de Lácteos Segarra es el queso de cabra fresco. Se trata de un queso tradicional de sabor muy suave, aunque intenso. Su textura lo convierte en una de las mejores opciones para cocinar y, como todos nuestros quesos, está elaborado de manera tradicional. Pero ¿quieres saber cómo freír queso de cabra? Te aseguramos que el resultado es del todo exquisito y no decepciona.

 

Freír queso de cabra, una auténtica delicia

 

Si nunca habías leído nada sobre freír queso de cabra, déjanos decirte que te estás perdiendo una verdadera delicia. Tanto para aperitivos como para ensaladas, freír queso de cabra es una opción idónea para sorprender y disfrutar de un alimento que está muy rico. Nuestro queso de cabra fresco no te va a decepcionar, aunque tenemos otras opciones en Lácteos Segarra que, tal vez, también te encanten.

 

Pero ¿por qué freír queso de cabra? Por una razón muy sencilla y es que puedes resaltar el sabor de este queso tan especial. Ese sabor intenso del que te hablábamos lo puedes potenciar al freírlo, algo que no pasará desapercibido para los grandes amantes del queso. Si tú eres uno de ellos, no te lo pienses más. Saber cómo freír queso de cabra es algo que debes conocer hoy mismo.

 

Ingredientes para freír queso de cabra

 

Para freír queso de cabra necesitas un buen queso, como el que puedes encontrar en Lácteos Segarra, pan rallado, huevo, sal y un poco de aceite de oliva. Esto es lo único que necesitarás para obtener un delicioso resultado. Lo ideal es que el queso esté en la nevera hasta que lo vayas a utilizar y que lo frías justo antes de servir para que quede lo más cremoso posible. Una vez que hagas esta receta ¡la repetirás siempre!

 

El proceso de freír queso de cabra

 

Una vez ya tengas los ingredientes, lo que vas a hacer es poner en un plato abundante pan rallado y en otro un huevo que debe estar batido. A él le añadirás un poco de sal. En una sartén agregarás el aceite de oliva (mejor virgen extra) y pondrás el fuego en un nivel medio. Mientras se calienta, puedes sacar el queso de la nevera y partirlo en trozos. Estos los pasarás por el huevo y, después, por el pan rallado.

 

¿El aceite de la sartén está ya caliente? Pues pon el queso rebozado en ella. Deja que se dore bien por cada lado antes de darle la vuelta. De esta manera, evitarás que se rompa. En cuanto saques el queso ponlo en un plato sobre un papel de cocina absorbente, ya que tendrá bastante grasa. Ahora puedes repetir el proceso con el resto del queso. Es muy sencillo freír queso de cabra y está buenísimo.

 

Un consejo que te queremos dar desde Lácteos Segarra es que si al freír queso de cabra el resultado no te convence, porque no es tan crujiente como te gustaría, lo que puedes hacer es que después de pasar el queso por el huevo y el pan rallado vuelvas a repetir el proceso. De esta manera, te quedará una doble cobertura que incrementará su textura crujiente. Eso sí, en su interior el queso estará fundido y delicioso.

 

Ahora que ya sabes cómo freír queso de cabra, ¿a qué esperas para probarlo? Lo vas a poder añadir a ensaladas u ofrecerlo como aperitivo. Te aseguramos que a tus comensales les vas a dejar con la boca abierta. Freír queso de cabra de alta calidad, como el que puedes encontrar en Lácteos Segarra tendrá un resultado delicioso. No podrás comer solo un trozo de queso y repetirás esta receta más de una vez.

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